Una de las reglas de oro en las finanzas es no invertir dinero en algo que no entiendes. Antes de comprar un seguro es necesario conocer muy bien el proceso para adquirirlo junto con los elementos clave que lo componen. ¡Aquí te contamos 5 cosas que debes saber!
1. ¿Qué es un seguro?
Es un instrumento financiero que busca protegerte de eventos desfavorables e inesperados, reduciendo el impacto económico que se genera a raíz de ellos. Si ocurre un evento que te pueda llegar a generar pérdidas económicas, tener un seguro te ayudará a estar preparado financieramente para afrontar estas emergencias.
2. ¿Cuáles son las palabras clave de los seguros?
Estos son los conceptos que necesitas conocer al momento de adquirir o comprar un seguro:
● Amparo o cobertura. Son los eventos que están protegidos por el seguro.
● Póliza. Es el documento o contrato donde se describen las condiciones bajo las cuales adquieres el seguro.
● Exclusiones. Son las condiciones específicas señaladas en la póliza de seguro que no están cubiertas. Es decir, el seguro no las paga.
● Prima. Es el valor o precio del seguro que debes pagar periódicamente.
● Siniestro. Suceso en el que se originan daños a personas o bienes.
● Valor asegurado. Valor cubierto por la póliza en caso de que ocurra un siniestro y por el cual la entidad aseguradora debe responder.
● Reclamación. Solicitud que se hace a la aseguradora para recibir el pago después de ocurrido el siniestro.
● Indemnización. Compensación o pago monetario que se recibe de la aseguradora por la ocurrencia de un siniestro.
● Vigencia de la póliza. Es el día y la hora en que inicia y termina la cobertura del seguro.
● Periodo de carencia. Es el periodo de tiempo entre el momento en que firmas la póliza de seguro e inicia la vigencia de este mismo. Durante este tiempo no se tiene cobertura.
● Deducible. Es la cantidad de dinero que asume el tomador o asegurado cuando ocurre un siniestro. Puede ser un monto específico, un porcentaje del valor asegurado o un número de salarios mínimos. Es el mecanismo que tienen las compañías de seguros para compartir la pérdida con los asegurados y que estos eviten que ocurra un siniestro.